Barómetro Sanitario 2010: los españoles damos al Sistema Nacional de Salud una nota de 6,57 sobre 10
La opinión que tenemos los españoles de la sanidad es cada vez mejor, aunque evoluciona muy lentamente. Según los datos del Barómetro Sanitario de 2010,hemos pasado del 6,1 en 2005 al 6,57 en 2010 sobre una nota de diez, es decir, todavía no llega al notable. De lo que más nos quejamos cada año es de las listas de espera y de las cada vez mayores desigualdades entre comunidades autónomas, cuando la sanidad debe ser un derecho universal e igualitario independientemente del lugar donde residamos.
Los servicios más valorados son, por este orden:
- la atención primaria (consulta de médico de familia y pediatra en centros de salud), con un 7,06
- el ingreso y la asistencia en hospitales públicos, con un 6,7
- la atención especializada (consultas de especialistas en centros públicos), con un 6,65
- las urgencias en hospitales públicos, con una nota de 5,96
La mayoría de los encuestados se manifiestan partidarios del uso del sistema sanitario público frente al privado. Así ocurre en las distintas opciones analizadas por el estudio:
- Consultas de atención primaria (63,86% frente a 29,75%).
- Consultas de médicos especialistas (47,97% frente a 42,94%).
- Urgencias (59,60% frente a 32,99%).
- Hospitalización (58,79% frente a 33,73%).
Además, 3 de cada 10 personas acudieron a un servicio de urgencias en el último año y la mayoría de ellas utilizó los servicios de los hospitales públicos.
El Barómetro también recoge que cuando se pregunta a qué centro acudirían si tuvieran opción de elegir en caso de sufrir una enfermedad grave, 6 de cada 10 españoles elegirían la atención sanitaria pública, 3 optarían por los servicios asistenciales privados y 1 acudiría indistintamente a uno u otro servicios.
Los principales motivos para escoger los centros de salud y hospitales públicos serían los medios y la tecnología de los centros, la capacitación de los profesionales sanitarios y la información que reciben sobre sus problemas de salud. Por el contrario, quienes prefieren la sanidad privada lo hacen por la rapidez de su atención y la comodidad de sus instalaciones.
Suspenden el tiempo que los médicos especialistas tardan en ver a los pacientes desde que se pide una cita (4,89 sobre 10), el retraso en la entrega de los resultados de las pruebas diagnósticas (4,87) y el tiempo de demora para el ingreso no urgente en el hospital (4,74). Y casi la mitad de los encuestados opina que en el último año el problema de las listas de espera sigue igual.
No hay comentarios:
Publicar un comentario