El nuevo modelo de negocios de Twitter
Durante un tiempo los ejecutivos de la red social más veloz ignoraron su potencial para ganar dinero. Pero de la mano del ex ejecutivo de Google, Dick Costolo, un nuevo modelo de negocios podría convertir al pajarito de Twitter en una máquina de hacer billetes.
VIE 02 MAR 2012 | 13:50
No es fácil la vida para el emprendedor y mucho menos si tiene una start up con éxito. Muchas veces la vida de la compañía puede ser dura, difícil y, lo peor de todo, corta. A medida que crece los egos de quienes colaboran puertas adentro comienzan a chocar, los inversionistas se pelean por el control de la compañía y las complejidades del negocio empiezan a convertirse en verdaderos desafíos para los fundadores de una start up. Peter Fenton, un inversor de riesgo que integra el directorio de Twitter, bautizó a este fenómeno como “la violencia de las startups”.
Lo cierto es que en sus cinco años de existencia, Twitter se acercó muchas veces al suicidio. Los problemas en el servicio -simbolizados en el sitio con el dibujo de una ballena a la que llamaron “fail whale”-, la falla de seguridad de 2009 durante la cual se filtraron varios documentos y el éxodo de empleados clave fueron algunas de sus crisis más importantes. Que en tres años Twitter haya tenido tres directores ejecutivos es síntoma de que algo malo está pasando. Sin embargo, en 2010 las cosas comenzaron a mejorar: Dick Costolo, un ex ejecutivo de Google, llegó como director ejecutivo, y Jack Dorsey, uno de los fundadores, volvió como jefe de productos.
Desde la llegada de estos dos hombres las cosas empezaron a cambiar en la compañía. De la mano de ejecutivos con experiencia Twitter hoy está dedicada a ofrecer un mejor servicio y también a hacer dinero. Los símbolos del hashtag (#) y el arroba para hablarle a otro usuario (@) están siendo explotados al máximo en la publicidad de marcas como General Motors y Budweiser que invirtieron mucho dinero en la plataforma social durante la noche del Superbowl. De hecho, se estima que para este año la empresa gane US$ 260 millones.
Esa suma podrá ser insignificante para empresas rivales como Facebook o Google pero es importante para Twitter porque implica la posibilidad de monetizar su plataforma y la entrada al presupuesto de publicidad de las grandes compañías. Durante años parte del encanto de Twitter fue su rechazo a generar ingresos que comprometiesen la experiencia de usuario. Su nuevo modelo de negocios quiere preservar parte de esa mística pero unirse, también, a los pesos pesados de la industria. Sus buenos lazos con Apple para incluir su plataforma de manera predeterminada en dispositivos como el iPad o el iPhone podrían aumentar su base de usuarios.
El hashtag, el símbolo mediante el cual los usuarios pueden agrupar mensajes bajo un mismo tema, es también una herramienta que Twitter puede usar a su favor. Las empresas lo usan cada vez más para identificarse en otras redes sociales, como Facebook, porque es su manera de integrarse a una conversación online interminable. Es que aunque su base de usuarios es relativamente pequeña si se la compara con Facebook (100 millones versus 800 millones) Twitter es hoy el canal donde nacen y se desarrollan las conversaciones del mundo. Es desde el dialogo que Twitter estimula a los usuarios a compartir contenido y no al revés. No debería sorprender a nadie que las conversaciones más relevantes del último año, como la de la primavera árabe, hayan ocurrido allí.
Costolo, el director ejecutivo, es responsable de esta fase madura de Twitter. Expandió la compañía de 45 personas a 900, algunos de ellos talentosos ejecutivos de compañías rivales, e inspiró en todos un objetivo común. Sin prisa, pero sin pausa, ha logrado un crecimiento en la empresa y un cambio de filosofía mediante un plan de negocios lógico y eficaz. Pero todavía, dice, no hay planes de una oferta pública inicial en la empresa del pajarito.
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