domingo, 18 de septiembre de 2011

[Identidad Bibliotecaria] Un incunable del siglo XV, el libro más caro de la Feria de Libro Antiguo


Un incunable del siglo XV, "Dialogorum de Dignitate Sacerdocii", de Johannes Chrysostomus, es, con un precio de 12.000 euros, el ejemplar más caro de la 60 edición de la Feria del Libro Antiguo y Moderno, que hoy se ha inaugurado con un pregón del escritor Màrius Serra.

 

El "Dialogorum", impreso por Ulrich Zell en Colonia (Alemania) en 1472 es una de las principales obras de Juan Crisóstomo, uno de los cuatro grandes Padres de la Iglesia de Oriente.
Su valor se incrementa, además, por la circunstancia de que el ejemplar perteneció a Richard Heber, que llegó a contar con una biblioteca de autores clásicos y de literatura inglesa de más de 150.000 libros.
Con 60 años de existencia ininterrumpida, la feria barcelonesa, una de las más antiguas de Europa, pone al alcance del público unos 100.000 ejemplares, entre joyas de la historia de la edición, pero también títulos económicos que no se encuentran en las librerías corrientes.
El público podrá visitar la feria desde hoy y hasta el 2 de octubre en el céntrico paseo de Gràcia, donde se han dispuesto las casetas.
Además del libro de Johannes Chrysostomus, destaca otro incunable, "De Institutione coenobiorum", de Juan Cassiano (Venecia -Italia-, 1491), tasado en 6.500 euros, que recoge la ordenanza para el gobierno de los monasterios en la Edad Media.
En la feria también se pueden adquirir las "Memorias sobre la Guerra de Cataluña desde 1847 a 1848", de Manuel Pavía (Madrid, 1851), obra primordial para entender la Guerra Carlista en Cataluña.
Una gramática egipcia del egiptólogo Jean-François Champollion (París, 1836-1841); el decreto de "Nueva Planta de la Real Audiencia del Principado de Cataluña" (1716), que abolía las libertades de Cataluña; los fueros de Valencia comentados (1677) o un "Canigó" de Verdaguer, dedicado al poeta de la Renaixença Silvino Thos Codina son otras de las joyas que se muestran en la feria.
Por cuarto año consecutivo, y tras la buena acogida del público en las tres ediciones anteriores, este año la feria ha vuelto a poner en marcha el punto de reciclaje "El Libro Solidario y Unicef", en el que cualquiera puede donar los libros que ya no quiera y que se pondrán a la venta inmediatamente en el mismo punto con precios simbólicos que van desde 1 a 5 euros.
En su pregón, el escritor y 'enigmista' Màrius Serra habla de la "bibliofagia", "algo diferente de la bibliofilia", de alguien que, "lejos de leer, devora los libros".
En ese cuento que Serra lee al final de su discurso, el protagonista, el "bibliófago", que tal vez pudiera compartir algunos caracteres del propio escritor, hace referencia a cómo algunas expresiones pierden sentido con el tiempo y se convierten en lenguaje figurado.
Expresiones como "la bajada de bandera de los taxistas o la feria de 'singles', que ahora tiene más que ver con los encuentros entre solteros que no con el intercambio de discos de vinilo", señala el autor barcelonés, para quien "la lengua hace tantos saltos mortales, que por eso nunca morirá".
"Sin ánimo de ponerme apocalíptico -dice Serra-, en el futuro todas las ferias del libro serán del libro antiguo, pues aunque los niños leerán en dispositivos digitales, los libros de papel se mantendrán, como los vinilos".
Por esa razón, Màrius Serra cree que la Feria del Libro Viejo de Barcelona "refleja el pasado, pero también refleja el futuro".

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