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miércoles, 5 de enero de 2011
Epidemiología de la fractura de cadera: variaciones mundiales
anemias
Protocolo diagnóstico de las anemias normocíticas
http://www.elsevier.es/watermark/ctl_servlet?_f=10&pident_articulo=13128621&pident_usuario=0&pident_revista=62&fichero=62v10n20a13128621pdf001.pdf&ty=96&accion=L&origen=medicine&web=www.medicineonline.es&lan=es
Protocolo diagnóstico de las anemias macrocíticas
http://www.elsevier.es/watermark/ctl_servlet?_f=10&pident_articulo=13128622&pident_usuario=0&pident_revista=62&fichero=62v10n20a13128622pdf001.pdf&ty=97&accion=L&origen=medicine&web=www.medicineonline.es&lan=es
Protocolo diagnóstico de las anemias microcíticas
http://www.elsevier.es/watermark/ctl_servlet?_f=10&pident_articulo=13128620&pident_usuario=0&pident_revista=62&fichero=62v10n20a13128620pdf001.pdf&ty=95&accion=L&origen=medicine&web=www.medicineonline.es&lan=es
Protocolo diagnóstico de las anemias hemolíticas
http://www.elsevier.es/watermark/ctl_servlet?_f=10&pident_articulo=13128623&pident_usuario=0&pident_revista=62&fichero=62v10n20a13128623pdf001.pdf&ty=98&accion=L&origen=medicine&web=www.medicineonline.es&lan=es
http://www.elsevier.es/watermark/ctl_servlet?_f=10&pident_articulo=13128621&pident_usuario=0&pident_revista=62&fichero=62v10n20a13128621pdf001.pdf&ty=96&accion=L&origen=medicine&web=www.medicineonline.es&lan=es
Protocolo diagnóstico de las anemias macrocíticas
http://www.elsevier.es/watermark/ctl_servlet?_f=10&pident_articulo=13128622&pident_usuario=0&pident_revista=62&fichero=62v10n20a13128622pdf001.pdf&ty=97&accion=L&origen=medicine&web=www.medicineonline.es&lan=es
Protocolo diagnóstico de las anemias microcíticas
http://www.elsevier.es/watermark/ctl_servlet?_f=10&pident_articulo=13128620&pident_usuario=0&pident_revista=62&fichero=62v10n20a13128620pdf001.pdf&ty=95&accion=L&origen=medicine&web=www.medicineonline.es&lan=es
Protocolo diagnóstico de las anemias hemolíticas
http://www.elsevier.es/watermark/ctl_servlet?_f=10&pident_articulo=13128623&pident_usuario=0&pident_revista=62&fichero=62v10n20a13128623pdf001.pdf&ty=98&accion=L&origen=medicine&web=www.medicineonline.es&lan=es
martes, 4 de enero de 2011
Gastrenterología
Protocolo diagnóstico de las alteraciones del nivel de conciencia en la cirrosis
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Protocolo diagnóstico etiológico de la ascitis
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Protocolo diagnóstico del paciente con cirrosis y fiebre
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Protocolo diagnóstico etiológico de la ascitis
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Protocolo diagnóstico del paciente con cirrosis y fiebre
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Protocolo diagnóstico del paciente con dolor agudo en hipocondrio derecho y fiebrepulse sobre visualizar documento
Protocolo diagnóstico del dolor en hipocondrio derecho en paciente afebrilpulse sobre visualizar documento
Protocolo diagnóstico del paciente con dolor agudo en hipocondrio derecho y fiebrepulse sobre visualizar documento
Protocolo diagnóstico del dolor en hipocondrio derecho en paciente afebrilpulse sobre visualizar documento
Educar las emociones
Educar las emociones Les enseñamos a montar en bicicleta y a comer con cubiertos... Nos preocupamos por su destreza matemática y su nivel de inglés... ¿Y de sus emociones? ¿Nos ocupamos de que los niños distingan si están tristes o enfadados, de que puedan expresar su rabia o su rechazo sin dañar a otros? Portada del suplemento Estilos de Vida del sábado 1 de enero de 2011 “Los padres nos preocupamos como nunca de que nuestros hijos estén preparados para una sociedad competitiva: controlamos que el sistema educativo les proporcione un buen desarrollo cognitivo y los apuntamos a todo tipo de extraescolares y de actividades complementarias para conseguir que los niños sean más inteligentes, más eficaces; en cambio, damos muy poca importancia a su aprendizaje emocional y este es fundamental, porque sin equilibrio emocional nuestro hijo no será feliz, ni le veremos triunfar en su vida, por muy preparado que esté”. La reflexión es de Purificación Sierra, profesora de Psicología del Desarrollo de la Uned, pero resume bien el sentir de muchos psicólogos, pedagogos, maestros y educadores en general, que con frecuencia expresan su inquietud por la escasa atención que se presta en muchas familias a la educación emocional de los niños. Cristina Gutiérrez ha visto pasar por la granja escuela que dirige en Santa Maria de Palautordera (Barcelona) a más de 10.000 niños y niñas de todas las edades, y asegura que le preocupa ver que cada vez llegan más con evidentes problemas emocionales. “Nos llegan muchos niños con poca autoestima, que sienten que sus vidas no les pertenecen, fruto de la sobreprotección de sus familias, y también vemos muchos con problemas emocionales y de relación porque en casa viven incomunicados, volcados en la consola y el ordenador, esperando a que lleguen sus padres de trabajar para cenar delante del televisor y regresar a su isla”, comenta. Y apunta que estos problemas se concretan en niños de 8 y 9 años que no saben bajar escaleras, o en malos hábitos alimentarios, como una niña que llegó con siete fuets en la mochila para pasar el fin de semana de colonias porque no le gusta ni come nada más. “Con su sobreprotección, los padres dejan a sus hijos desprotegidos para afrontar la vida, con unas carencias emocionales muy importantes”, asegura Gutiérrez, que hace cuatro años decidió reorientar todas las actividades de la granja escuela en aras de la educación emocional: desde enseñar a los niños a identificar y verbalizar sus emociones, hasta aprender a controlar sus miedos, a canalizar sus enfados o a relacionarse con otros. Cabría pensar que las emociones se aprenden solas, a fuerza de sentirlas, pero parece que no siempre es así, y que el equilibrio emocional requiere algunas enseñanzas y, sobre todo, mucho entrenamiento. “El conocimiento de las emociones se aprende a través de las experiencias de la vida: si hay una tormenta o siente una amenaza, el niño tiene miedo; si sufre una pérdida, está triste; pero cada uno reacciona emocionalmente de forma distinta, porque no nos emociona lo que ocurre sino cómo interpretamos lo que ocurre”, explica Antonio Vallés, profesor de Psicología de la Salud de la Universidad de Alicante y autor de La inteligencia emocional de los hijos. Cómo desarrollarla (EOS Gabinete de Orientación Psicológica) y La inteligencia emocional de los padres y de los hijos (Pirámide), entre otros libros. Y es en esa interpretación de lo que ocurre, de lo que sentimos y de cómo reaccionamos ante ello en la que los padres tienen mucho que hacer con miras a la formación emocional de sus hijos. "A medida que los niños van desarrollando las emociones no saben lo que les pasa; pueden aprenderlo de forma natural, por experiencia, pero también podemos ayudarles y alentar ese desarrollo etiquetando sus emociones, enseñándoles a distinguir cuando están enfadados de cuando están tristes; y está demostrado que si los padres ayudan, los niños se relacionan mejor y entienden mejor lo que les pasa", asegura Purificación Sierra. Etiquetar los sentimientos Porque el primer paso en el aprendizaje emocional es lo que los expertos llaman conciencia emocional: saber identificar las emociones en uno mismo y en los demás y ser capaz de expresar lo que se está sintiendo con palabras.Yeso, en el caso de los niños, significa enseñarles a comprender qué emociones tienen en cada situación, si son adecuadas para relacionarse con los demás y para sentirse bien, pero también dotarlos de vocabulario suficiente para expresarlas. Las seis emociones básicas, que se reconocen fácilmente por su expresión facial –alegría, tristeza, miedo, enfado, sorpresa e ira–, han de ir completándose, a medida que los niños crecen, con otras etiquetas emocionales que permitan definir con exactitud qué emoción, sentimiento o estado de ánimo tienen. Felicidad, satisfacción, optimismo, tranquilidad, calma, buen humor, euforia o júbilo pueden permitir expresar diferentes grados y percepciones de la alegría; como molestia, irritación, celos o furia pueden expresar enfado; o preocupación, temor, nerviosismo, horror y pánico pueden servir para concretar el miedo. Y no menos importante que enseñar a los hijos a poner nombre a lo que sienten es dejarles que lo expresen, que en casa puedan llorar si están tristes o contar que alguien les cae mal sin que se les censure y sin que se reste importancia a aquello que les pasa. “Si se sienten incomprendidos, si les decimos que no pasa nada, que lo que les ocurre es una tontería, no lo expresarán más”, advierte Sierra. Controlar y socializar las emociones Pero que no haya que censurar al niño porque está enfadado o triste, que no haya que negar las emociones, no quiere decir que haya que dejar que las exprese de cualquier manera. “No se trata de decir al niño que expresa su ira dando una patada que no tiene que enfadarse; hay que explicarle, cuando se calme, que enfadarse es normal, que nos pasa a todos, pero que ha de controlar su impulsividad y buscar otras vías de expresar su rabia sin dañar a otros”, afirman los expertos consultados. Cristina Gutiérrez explica que, en La Granja, los animan a liberarse de la rabia yendo a correr o a chillar al patio, dando patadas al balón o golpes a un saco de boxeo. La psicóloga Purificación Sierra enfatiza que el comportamiento emocional tiene mucho de social y por eso hay que enseñar a los hijos a regularlo. “Se acepta que un niño llore al dejarlo en la guardería o en su primer día de colegio, pero no que lo haga cada día con cinco años; también admitimos que de pequeños expresen su desagrado si un regalo no les gusta, pero si crecen diciendo siempre lo que piensan y sienten, resultarán conflictivos; por eso hay que desarrollar su empatía y enseñarles a regular sus comentarios para que no hagan daño a quien les regala con ilusión”, ejemplifica. Antonio Vallés da algunas pautas para enseñar a regular las emociones negativas de enfado, miedo y tristeza: “Expresar el enfado de manera inteligente y socialmente adecuada exige controlar las rabietas y respuestas agresivas sustituyéndolas por conductas verbales que expresen el estado de ánimo pero sin alterarse demasiado y respetando a los demás; las respuestas de miedo y enfado deben regularse mediante la relajación, la respiración y el cambio de pensamiento; si aprendemos a relajarnos, a darnos cuenta de cuándo empezamos a enfadar nos o a asustarnos y respiramos profundamente, nos autohablamos (debo tranquilizarme, es mejor que me calme, etcétera), estamos gobernando nuestras emociones y evitaremos que nos alteren y descontrolen”. Rafael Bisquerra, director del máster en Educación Emocional de la Universitat de Barcelona (UB), considera que la clave de la regulación emocional es encontrar el equilibrio entre el descontrol propio de la impulsividad del organismo (una emoción es una respuesta neurofisiológica) y la represión. Y advierte que encontrar ese punto intermedio no es fácil, requiere entrenamiento y, sobre todo, un buen equilibrio emocional de los padres. “No puedes pedir a tu hijo que controle su ira gritándole; que él esté descontrolado, que grite, no nos autoriza a descontrolarnos nosotros; y eso, que es fácil de decir y entender, esmuydifícil de aplicar, porque para tolerar sus gritos con cierta impasibilidad hay que tener autonomía emocional, no dejarnos arrastrar por las emociones de los otros o del entorno, y ser capaz de relacionarnos de forma positiva”, explica Bisquerra. En su opinión, desarrollar las competencias emocionales propias y de los hijos es cuestión de entrenamiento, como tocar en una orquesta o jugar en un equipo de fútbol, y resulta fundamental para poder relacionarse con los hijos, especialmente durante la adolescencia. “Los padres con hijos adolescentes se enfrentan a una tensión continua donde el chaval tiene una gracia especial para decir todo aquello que provoca una reacción visceral en los padres, y estos han de poder regularse para no ponerse al mismo nivel, para mantener los límites con cariño y responder a los ataques iracundos con el amor y no con más ira”, relata. También el profesor Vallés cree que los padres han de prestar especial atención a los estados de ánimo de los hijos adolescentes porque los cambios psicológicos, biológicos y sociales que viven en esas etapas les producen nuevas emociones que deben aprender a identificar, expresar y regular. “Los padres deben mostrarse especialmente comunicativos, dispuestos a escuchar sin censurar y a ayudar, porque eso contribuye a disminuir la intensidad de un estado de tristeza, desánimo, temor o inquietud; hay que afrontar sus conductas de descontrol y sus respuestas irascibles con una actitud empática, enseñándoles calma, sosiego y haciéndoles comprender que lo que piensan cuando están enfadados es diferente de lo que pensarían en una situación de calma y tranquilidad”, indica. Claro que, para poder actuar así, los padres han de saber regular bien su ansiedad y su ira. “Está claro que no es fácil, pero las consecuencias de no preocuparse por la formación emocional son tan graves, que vale la pena intentarlo”, remarcan los especialistas consultados. Bisquerra apunta que la falta de formación emocional se traduce en una impulsividad descontrolada y en una baja tolerancia a la frustración, “unas condiciones que, cuando coinciden con una inteligencia media baja, dan lugar a unas relaciones explosivas entre padres e hijos –sobre todo en la adolescencia–, y predisponen a actitudes de riesgo como el consumo de drogas, embarazos no deseados, conducción temeraria, violencia de género, depresión...”Como modificar el nivel de inteligencia es complicado, el director del máster en Educación Emocional de la UB considera que la mejor forma de prevenir todos esos problemas es desarrollar competenciasemocionales para controlar la impulsividad y aumentar la tolerancia a la frustración. Antonio Vallés cree que el esfuerzo de los padres para mejorar el comportamiento de los hijos acostumbra a centrarse en las normas de conducta y la disciplina “y, sin embargo, el conocimiento de las emociones y sentimientos de los hijos puede ayudar mucho a la comprensión de uno mismo y también a entender las causas de sus conductas”. |
lunes, 3 de enero de 2011
La Personalidad
Christian Chaler - cchaler@gmail.com
La Personalidad
La personalidad es uno de los aspectos que nos constituyen como seres humanos, existe tambien un aspecto traspersonal y un aspecto físico que nos constituye, conformando una unidad dinámica interrelacionada que nos caracteriza, siendo así el ser humano un ser Psico-Bio-social.
Este espacio pretende analizar temáticas relacionadas con la personalidad y sus trastornos, un tema de importancia fundamental en la actualidad dado los crecientes índices de crecimiento de los problemas de salud mental en la mayoría de los países del mundo y considerando que las deficiencias en este fundamental aspecto del ser humano son el origen de innumerables factores de desadaptación con nosotros mismos, los demás y la sociedad.
Sigue los pasos indicados a continuación e informate sobre aspectos relacionados a como esta constituida nuestra personalidad y los desordenes que esta puede tener.
PERSONALIDAD Y TRASTORNOS
Paso1 - Hacia una definición de personalidad
Existen muchas teorías de la personalidad que distintos autores fueron exponiendo desde los inicios del psicoanálisis a la actualidad, cada una de ellas cuenta en su contenido con la influencia de las vivencias personales de sus autores. Si se hace un correlato entre la biografía de los distintos autores y sus teorías se puede verificar que su vida personal y sus apreciaciones subjetivas influenciaron en las teorías y sus conclusiones expuestas, de todas las teorías pueden generarse hipótesis de investigación comprobables en mayor o menor medida y pero todas han aportado elementos nuevos y han ampliado el horizonte por el cual se conoce este aspecto tan importante del ser humano - Adjunto te dejamos un documento para descargar que engloba lo que consideramos son los aspectos mas importantes para llegar a una definición de la personalidad, obviamente esta cargada con nuestra subjetividad personal y nuestras vivencias.
Z1 - Hacia una definición de personalida
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Paso 2 - El Autoestima
Comentamos en el documento anterior que la personalidad es un constructo psicológico que tiene su inicio en la niñez en parte con la construcción de la relación con uno mismo y en la que los demás, en especial nuestra familia, tiene una gran influencia. En este segundo paso en el análisis de este tema profundizamos sobre los aspectos que como se construye el autoestima y que factores intervienen en su desarrollo.
Z3 - La Autoestima - Vinaros2010.doc
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Paso 3 - Dinamica de la personalidad
La personalidad no es algo estático es algo dinámico que asume distintos estados, nosotros no estamos siempre igual a veces estamos alegres otras veces no, a veces estamos tranquilos y otras veces podemos estar irritables, sentirnos con empuje o con decaimiento. Si bien dentro de los parámetros normales tenemos un estado en parte estable, la personalidad fluye en una dinámica, aun siendo esta dinámica con cierta estabilidad. La relación de nuestros estados afectivos, sentimientos, pensamientos, emociones varían en calidad e intensidad en función de los acontecimientos y vivencias externas y nuestras vivencias internas y subjetivas.
Z2 - Dinamica de la personalidad.doc
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Paso 4 - La salud Mental
Lee en este documento adjunto que es lo que llamamos salud mental y bajo que marco teorico se encuentra definido, cuales son sus determinantes y como nosotros podemos influir en la salud mental de nuestros hijos y de nuestros entornos de pertenencia.
Z4 - La Salud mental.doc
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Paso 5 - Factores sociales y salud mental
Lee en este documento como ciertos factores sociales, cuyo origen se encuentra en creencias ficticias que muchas son compartidas en ciertos ámbitos sociales se transforman en un escollo para personas afectadas en su salud mental y obviamente sus familias.
Z5 - Factores sociales en relación a la
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Paso 6 - Reinserciòn social
Lee en este documento desarrollado por la Dra. Jazmin Israelewicz, la relaciòn entre la necesidad de Desestigmatizaciòn y desmanicomializaciòn, para la reahabilitaciòn del paciente psiquiatrico.
DESESTIGMATIZACION Y REHABILITACION DEL
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Paso 7 - La autopercepción
Lee en este documento sobre la necesidad de desarrollo de nuestra capacidad de autopercepción y la necesidad de autoanalisis para tomar contacto real con nosotros mismos y detectar aquello, que desde afuera en apariencia, puede afectarnos.
Z6 - La Autopercepción.doc
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Paso 8 - El Temperamento
Lee en este documento sobre el temperamento, la base sobre la que se construye nuestra personalidad y que relación tiene con el proceso de aprendizaje familiar y social y con la presencia de factores que puedan contribuir a adquirir trastornos.
Z7 - El temperamento.doc
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Paso 9 - El Aprendizaje
Lee en este documento la influencia del aprendizaje en la conformación de la personalidad y sus posibles desequilibrios.
Z8 - El Aprendisaje.doc
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Paso 10 - Teoria de la personalidad
Analiza en este documento una propuesta de teoría de la personalidad, en la misma nos orientamos a analizar los factores que pueden influenciar y contribuir al cambio personal y que están muchas veces motivados por hechos de la vida que se constituyen en verdaderas pruebas limite para nuestros recursos internos, como también son una oportunidad para el desarrollo de capacidades internas y superación de debilidades.
Z9 - Teoria de la personalidad.doc
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Paso 11 - Trastornos de personalidad
En el siguiente documento se muestran los diferentes trastornos que puede padecer la personalidad y que están tipificados en el DSM IV - Manual Diagnostico y estadístico de trastornos mentales. También se analizan de forma general en base a los conceptos definidos en el anterior documento "Teoría de la personalidad (del cambio personal)", se adjuntas una tabla Excel en otro documento en el cual se analiza en base a los mismos conceptos cada trastorno en particular.
Z91 - Trastornos de la personalidad.doc
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Analisis - Trastornos de personalidad.xl
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Paso 12 - Origen de los trastornos
En el documento adjunto analizamos los posibles factores que pueden estar presente en el desencadenamiento de un trastorno de la personalidad, aconsejamos la lectura previa de los documentos del paso N°: 8 - El temperamento, N°ro: 9 - El Aprendizaje y N°: 10 - Teoría de la personalidad (del cambio personal).
Z92 - Origen de los trastornos de person
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Paso 13 - El Aspecto emocional sensorial
En el documento adjunto analizamos el aspecto emocional-sensorial que es uno de los aspectos constitutivos de nuestra persona, se analiza el origen de nuestras tendencias y necesidades de las emociones y estados afectivos y la relación de este aspecto con el resto de las partes constitutivas de nuestra persona.
Z93 - El aspecto emocional sensorial.doc
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Paso 14 - La percepción de lo externo
En el documento adjunto analizamos como percibimos en nuestra consciencia el mundo externo a nosotros mismos, como es la funcionalidad de la actividad de nuestro aspecto mental, del aspecto emocional sensorial y la voluntad en relación al a percepción del mundo y como alcanzamos un entedimiento de lo que percibimos por los organos de percepción.
Z94 - La percepción de lo externo.doc
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Paso 15 - La Conducta
En este documento analizamos los tipos de conducta que existen, la relación de la conducta con la voluntad y la actividad mental, tambien se efectuo un analisis de las conductas impulsivas e involuntarias en los trastornos de personalidad.
Z95 - La conducta.doc
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Paso 16 - Estructura sup de la personalidad
En este documento analizamos la estructura superior de la personalidad, el concepto de equilibrio, la actividad mental y la funcionalidad del conjunto personalidad.
Z96 - Estrutura superior de la personali
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Paso 17 - El Inconsciente
En este documento se analiza la conformación del inconsciente, se enuncian los resultados de las investigaciones realizadas por los investigadores mas significativos al respecto de los contenidos del inconsciente y se plantea una hipotesis al respecto de la ordenación de estos contenidos.
Z97 - El Inconsciente.doc
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