lunes, 2 de abril de 2012

AINES - espondilitis anquilosante y mas


¿Cómo hay que administrar los AINE en la espondilitis anquilosante?

Publicado en Semin Fund Esp Reumatol. 2008;09:137-43. - vol.09 núm 03
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Resumen

El tratamiento de la espondilitis anquilosante (EA) se ha basado en el uso de antiinflamatorios no esteroideos (AINE), al no haberse conseguido fármacos con mayor capacidad terapéutica como en la artritis reumatoide. En los últimos años los inhibidores del factor de necrosis tumoral (TNF) han supuesto un gran avance terapéutico en esta entidad, con una gran mejora de la calidad de vida en muchos pacientes resistentes a los AINE. Recientemente un ensayo clínico ha demostrado cierta reducción de la progresión radiográfica mediante el tratamiento continuado con AINE en la EA sintomática. En este artículo se plantea cómo deben utilizarse los AINE. La revisión de la literatura sólo aporta 2 estudios de características muy distintas que sugieren un cierto efecto modificador (retardo en la progresión radiográfica) del uso continuado de AINE. Aunque las pruebas actuales sugieren un posible impacto de los AINE en la evolución de la enfermedad, la carga de la evidencia no es lo suficientemente importante como para recomendar un uso mantenido de AINE en los enfermos con EA, si se tienen en cuenta además los posibles efectos secundarios y los costes derivados de su uso. Nuestra recomendación es que los AINE se deben administrar como tratamiento sintomático con la dosis y tiempo que cada enfermo requiera, pero sin forzar su uso mantenido.
Palabras clave Antiinflamatorios no esteroideos. Espondilitis anquilosante. Tratamiento.

Terapéutica: Actualización del tratamiento con AINE en espondiloartritis

Publicado en Reumatol Clin. 2007;3:46-50. - vol.3 núm Extra.2
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Introducción
La fusión espinal es la marca distintiva clínica y patológica de la espondilitis anquilosante (EA). Progresa lenta y uniformemente hasta producir los cambios posturales, pérdida de flexibilidad y limitación funcional típicos de EA avanzada. Los objetivos de la terapia dirigida a los pacientes con espondiloartritis son1: aliviar los síntomas (dolor, rigidez y fatiga), mantener la movilidad vertebral y periférica, prevenir la incapacidad física y reconocer y resolver las complicaciones articulares y extraarticulares. Los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) producen un alivio rápido del dolor y la rigidez y facilitan la movilidad y la realización de los ejercicios físicos2,3, por lo que han sido la base del tratamiento desde 1950. Pero el objetivo ideal es conseguir detener la progresión del daño estructural. En esta década se han producido mejoras significativas en diversas áreas de conocimiento y en herramientas para el diagnóstico, tratamiento y valoración de la enfermedad. A pesar del desarrollo de los anti-TNF, que ha supuesto una revolución terapéutica, los pilares básicos del tratamiento de EA siguen siendo la educación del paciente, los programas continuados de ejercicios y los AINE. Así lo confirman las encuestas de población4, en las que el 80% de los pacientes con EA se encuentra tomando AINE durante los últimos 12 meses, en general con un grado elevado de satisfacción. Los AINE más frecuentemente usados son indometacina, diclofenaco y los inhibidores selectivos de la COX-2 (coxib), entre otros4,5. La revisión de los ensayos clínicos aleatorizados muestra la eficacia de los AINE para aliviar el dolor y mejorar la función en la EA comparados con placebo6-12, pero aquéllos no han podido establecer diferencias significativas de eficacia o seguridad entre los diferentes AINE6,13-35, incluida fenilbutazona. En general, los ensayos eran de muy corta duración, con una muestra muy pequeña y con escasa homogeneidad entre ellos. Dos coxib han demostrado ser superiores a placebo y, al menos, tan eficaces como los AINE en el tratamiento de los pacientes con EA36,37. Dos revisiones sistemáticas recientes38,39 confirman que existe evidencia de buena calidad de que AINE y coxib mejoran el dolor articular axial y periférico y la función de los pacientes con EA comparados con placebo, en un corto período, aunque el efecto en la afección axial es mayor. La clara respuesta de los pacientes con EA a los AINE (rápida, intensa y no mantenida tras la suspensión del fármaco) y sus conocidos efectos secundarios ha llevado, por un lado, a utilizar esta respuesta con fines diagnósticos y pronósticos y, por otro, al consumo, preferentemente a demanda, de los AINE en la práctica clínica.

RECOMENDACIONES DE BUENA PRÁCTICA CLÍNICA: Gastropatía por antiinflamatorios no esteroideos

Publicado en Semergen. 2008;34:502-6. - vol.34 núm 10
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Resumen

La gastropatía por antiinflamatorios no esteroideos (AINE) es una patología frecuente que debemos tener en cuenta ante todo paciente que nos consulte por problemas de dispepsia o astenia de larga evolución. Actualmente se cifran en 16.500 las muertes anuales por complicaciones por el consumo de estos fármacos y en más de cien mil, los ingresos hospitalarios anuales, datos que pueden darnos una idea de la verdadera importancia del problema. Los factores de riesgo implicados más frecuentemente y que siempre debemos tener en cuenta son la edad (mayor de 65 años), la toma conjunta de más de un AINE, la toma de anticoagulantes o corticoides, ISRS o ISRNS, ulcus o gastropatía previos y la existencia de alguna enfermedad concomitante grave. Otro aspecto a tener en cuenta es la erradicación del Helicobacter (H.) pylori, lo que parece que es coste efectivo y reduce el riesgo de complicaciones gastrointestinales (GI). Ante un paciente con factores de riesgo en el que vayamos a iniciar un tratamiento con AINE o ya lo siguiera por cualquier causa, que tuviera un evento GI, debemos, siempre que se pueda, suspender el AINE y testar el H. pylori para erradicarlo si sale positivo y posteriormente reiniciar el tratamiento con AINE más conveniente (si se puede, siempre el menos gastrolesivo) teniendo en cuenta los factores de riesgo GI y cardiovasculares y asociando un protector gástrico. El papel actual de los COX-2, como AINE y con un riesgo de lesión GI menor que los AINE clásicos, debe tenerse también en cuenta, si bien debe barajarse el riesgo cardiovascular del paciente en la decisión de dicha alternativa terapéutica.
Palabras clave gastropatía, AINE, COX-2, Helicobacter pylori, factores de riesgo.

Administración de AINE por vía tópica

Publicado en Offarm. 2001;20:128-31. - vol.20 núm 02
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Atte.
Dr.Máximo Cuadros Chávez

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