sábado, 3 de diciembre de 2011

12 signos que estás en un aula del siglo XXI


El blog de TotemGuard

12 signos que estás en un aula del siglo XXI
Esta semana tuve la oportunidad de colaborar en un proyecto de marketing con los alumnos de 4º ESO del Colegio Montserrat de Barcelona. El Colegio va a ofrecer el Bachillerato Internacional el año que viene y el centro pensó que quién mejor que los propios alumnos para desarrollar su plan de comunicación. Este plan va dirigido a atraer a esta opción educativa a padres y alumnos, tanto dentro como fuera del centro.
Realmente en mis días de colegio e incluso universitarios, nunca experimenté un proyecto de aula como éste, pero quizás van siendo más comunes en los centros educativos de España gracias a metodologías educativas innovadoras que aprovechan las TIC.
Los signos que te indican que estás en un aula del siglo XXI pueden ser:
1. Los profesores proponen actividades que van más allá del temario oficial. Los alumnos de este curso han de crear una empresa innovadora que ofrezca un producto o servicio que todavía no exista en el mercado. Compiten en grupos por el puesto en un concurso internacional. Los alumnos experimentan dificultades, averiguan qué hacer cuando se encallan y sin saberlo, aprenden a aprender.
2. Los profesores actúan como mediadores del aprendizaje. Se limita la cantidad de información y apoyo para maximizar la habilidad de los alumnos a responsabilizarse de un proyecto.
3. Los profesores invitan a expertos y a padres del centro para enriquecer el desarrollo académico de los alumnos. En el aula te encuentras a padres conversando con distintos grupos de alumnos, compartiendo información y experiencia profesional y ayudando a resolver sus dudas.
4. Los alumnos te muestran a través de sus netbooks su plan de comunicación y de empresa, visualizando muy poco papel en la mesa. No ves ningún libro.
5. El proyecto incluye el diseño y el desarrollo de una página web, un logo, la integración de un blog de aula para compartir experiencias durante el curso, el diseño de un folleto informativo y una campaña por correo electrónico, que pretende dar a conocer el nuevo programa educativo. Dominan muchas de las aplicaciones disponibles en la nube, posibilitando el desarrollo digital del proyecto.
6. Los alumnos consultan de inmediato via Google, wikipedia, etc, cualquier nuevo concepto que sugieres para el proyecto y desconocen. En segundos son capaces de ampliar información, formularte preguntas y tomar notas en sus portátiles para completar el contenido online.
7. Los alumnos reciben formación de la mano de expertos sobre el uso de las redes socialescon el fin de que estén familiarizados y experimenten con una aplicación profesional de los mismos. Aprenden netiqueta y cuáles son las reglas del juego. Descubres que dar libertad es más productivo que prohibir.
8. Los alumnos hablan de crear una página (y no un grupo) en Facebook, debaten sobre un#hashtag para sus tweets y deciden crear en YouTube su propio canal. Al mismo tiempo se comunican via Twitter con alumnos de otros países a fin de obtener testimonios y opiniones reales.
9. Los alumnos reflexionan sobre cuál debe ser el contenido del blog para que sea interesante y se comparta en redes sociales. Se convierten en productores (y no sólo consumidores) de contenido. En el blog piloto te encuentras instalados novedosos plugins que tan sólo tú descubriste hace una semana.
10. Los alumnos han incorporado el uso de códigos QR en el aula. Sólo ya a la puerta de la entrada del centro hay un gran código QR que te permite conocer las novedades. Cada lunes se actualiza con nueva información para que los padres y alumnos lo consulten.
11. Los alumnos se enfrentan por grupos a un proyecto real que verá la luz y sólo uno será el elegido. Les preocupa la competencia. Un grupo ha copiado a otro varias ideas y el logo y discuten cómo reaccionar ante este evento. También temen al fracaso: ¿Qué pasará si nadie nos visita en Facebook? Surgen conflictos de equipo y han de resolver sus diferencias. A la edad de 15 años ya han de solucionar los problemas reales con los que la mayoría de los adultos nos encontramos en el mundo profesional.
12. El diseño del aula permite interactuar cómodamente ya que desaparece la estructura clásica de alumnos sentados en filas para sentarse de una forma más compacta. Ves un aula amplia con forma de L y mobiliario flexible, que permite crear espacios y zonas diferentes de aprendizaje .
En el Colegio Montserrat se han definido tres espacios principales con el fin de facilitar tanto el trabajo autónomo como el cooperativo:
  • La cueva: Un espacio para trabajar individualmente, leer con calma o dejar que la creatividad fluya.
  • El fuego de campamento: Un espacio para escuchar a un experto hablar sobre un tema o para que los profesores expliquen las clases magistrales a todo el grupo. La comunicación entre alumnos y profesor no requiere de alzar la voz y hay un contacto visual constante entre ambos.
Mobiliario flexible y ligero para crear y disolver grupos de trabajo

  • La fuente: Un espacio que facilita el trabajo en equipo y una mayor interacción entre alumnos. Disponen de gradas que permite crear grupos de trabajo en un espacio reducido al aprovechar la altura.


Sin duda, lo realmente interesante de este proyecto va mucho más allá del uso de las TIC. Se transforma el concepto de educación. Se generan oportunidades para desarrollar, lo que considero, las habilidades críticas para tener éxito en cualquier profesión del futuro: comunicación oral y escrita, capacidad de análisis de información, pensamiento crítico, creatividad, trabajo en equipo, resolución de problemas y responsabilidad personal sobre el resultado. Como dije a Madre Montserrat, les estaré esperando cuando acaben para que vengan a trabajar y a colaborar conmigo. Sin duda, con estos inicios también aprenderé mucho de ellos.
¿Qué otras características incluirías como esenciales en un aula del siglo XXI?

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