lunes, 17 de enero de 2011

Notas placenteras

PSICOBIOLOGÍA
Notas placenteras
14/01/2011

La capacidad de la música de provocar reacciones fisiológicas es sabida, mas quedaba por explorar por qué ciertas melodías causan un efecto placentero en las personas similar a la comida o las relaciones sexuales. La Novena sinfonía de Beethoven, las Cuatro estaciones de Vivaldi o Moby Dick de Led Zeppelin, fueron algunas de las composición que investigadores del Instituto Neurológico de Montreal de la Universidad McGill emplearon para demostrar que los seres humanos somos capaces de obtener placer a través de estímulos abstractos. “La música, un estímulo abstracto, puede despertar sentimientos de euforia y el deseo, de forma similar a las recompensas tangibles como comer, las drogas o el sexo y que afectan al sistema dopaminérgico estriatal”, indican los autores del estudio.
El placer que origina la música se produce también con anticipación, es decir, aparece incluso antes de oír la composición. Así, el cerebro de los probandos que iban a escuchar su canción favorita liberaba dopamina justo antes de deleitarse con la melodía.
Para la medición se empleó una combinación de técnicas de tomografía por emisión de positrones (TEP) y de resonancia magnética funcional de imágenes cerebrales (IRMf). De tal manera se capturaron en línea y de forma conjunta las intervenciones de cada región cerebral en momentos concretos de la sesión musical. Se comprobó una disociación funcional en los probandos al escuchar su melodía preferida: el caudado aparecía más involucrado en la anticipación, mientras que el núcleo accumbens destacaba en el pico de respuesta emocional a la música.
Tales resultados indican que el placer intenso como respuesta al estímulo musical puede provocar la liberación de dopamina en el sistema estriatal. Además, demuestran que la anticipación de una recompensa abstracta puede originar la liberación de dopamina en una vía anatómica distinta de la que se asocia con el placer máximo en sí. Según los investigadores, el estudio ayuda a comprender por qué la música goza de un gran valor en las sociedades humanas.
“Es la primera vez que se demuestra que la recompensa abstracta, como la música, puede  provocar la liberación de dopamina. El estudio allana el camino para futuros trabajos sobre las recompensas no tangibles que los humanos consideran gratificantes por razones complejas”, concluye Zatorre.



Fuente: Montreal Neurological Institute and Hospital
Más información en Nature Neuroscience

No hay comentarios: